Parte de mi familia es francesa, y ya de pequeño me acostumbré a moverme en una casa con cajones llenos de grabaciones de cantantes franceses. Para mí eso no era, en principio, más que un pequeño ruido molesto que hacía las veces de banda sonora en los viajes en coche (cuando tuvimos un coche con radio, claro está, antes de eso las cantaban mis padres… sólo de pensarlo me dan escalofríos :-P).
Siendo más mayor, volví hacia esta música con curiosidad e interés renovado, y así redescubrí, entre muchos otros, al tan genial como desconocido Léo Ferré o a Georges Brassens. En el caso de este último, he comprobado en varias ocasiones que la mayoría de las personas no conocen su lado más gamberro y los inesperados destellos de genialidad cómica que impregnan buena parte de sus letras. Si todavía piensas que Brassens fue otro aburrido cantante francés, es un buen momento para darle una oportunidad…
Habría que citar aquí «L’Orage» (traducido como «La Tormenta»), de la que hay disponible una versión subtitulada (YouTube, 3:17) que respeta bastante bien el sentido original, y en donde habla de… bueno, un instalador de pararrayos con no muy buena fortuna, al menos en el amor. El gran Javier Krahe hizo en su día una versión genial (YouTube, 5:27) que forma parte de su disco «Elígeme».